Retenido, intimidado y humillado por la Policía Nacional en el Parque María Luisa cuando iba a hacer un reportaje fotográfico
El viernes 19, un activista de Ecologistas en Acción de Sevilla sufrió una nueva agresión policial: mientras hacía fotos del estado lamentable del Parque de María Luisa, la Policía Nacional se le acercó para que demostrara que la cámara no era robada enseñándole el ticket de compra. Ante su respuesta previsible -no lo llevaba encima-, fue retenido, cacheado e interrogado en medio del parque. ¿Cuánto tiempo pueden las fuerzas del "orden" de esta ciudad continuar agrediendo impunemente a lxs ciudadanxs?
Esta es la nota de prensa que ha enviado Ecologistas en Acción:
El pasado viernes sobre las 12:15, el activista, al que le fue intervenida 1 cámara fotográfica de su propiedad, venía de registrar otra denuncia, por infracción de hasta 5 artículos de la Ordenanza de Arbolado, Parques y Jardines Públicos, contra el Ayuntamiento, por distintas actuaciones en los Jardines del Prado de San Sebastián, durante la celebración, el pasado 13 de mayo, del V Mercado Medieval y se disponía a completar un reportaje fotográfico denunciando el penoso y lamentable estado en el que se encuentra el Parque de Maria Luisa, precisamente esta “detención” ha sido justo 2 días después de que se denunciara al alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, por contravenir la Ordenanza Municipal de Arbolado, Parques y Jardines Públicos. Por circular y estacionar vehículos en una zona peatonal, incumpliendo el articulo 13 de la mencionada ordenanza, ademas de contravenir el apartado d.) del punto 5 del articulo 23, de la mencionada ordenanza, que prohíbe expresamente el uso de vehículos a motor en lugares no autorizados, estando tipificada como una infracción MUY GRAVE.
El activista que fue “detenido” frente al Pabellón de Telefónica de la Exposición Universal de 1929, actual Escuela de Jardinería y C.E.M. Joaquín Romero Murube, fue interrogado sobre la procedencia de la cámara fotográfica que llevaba encima, declarando ante la policía que la cámara era de su propiedad, a lo que la policía le increpo llamándole “mentiroso” y que si era suya ¿donde estaba el ticket de compra?, además de decirle que le conocían y que ya sabían como era. Asimismo mientras hablaban entre los agentes llegaron a decirse entre ellos cosas como “pero tu te vas a creer algo del “nota” este, si es un mentiroso o no lo ves”. Incluso uno de los agentes que interrogo al activista le pregunto que cuanto tiempo hacia que había comprado la cámara, a lo que el activista respondió que un año y medio o 2, corrigiéndolo el agente, el cual le dijo que un primo suyo tenía una tienda de fotografía y ese modelo de cámara no llegaba a un año de antigüedad. Cuando la fecha del ticket de compra, presentado por el activista, es de septiembre de 2007.
Llegando a juntarse hasta 10 agentes de policía, (6 motoristas, 2 a caballo y un patrullero) del que salio un mando. Uno de los agentes obligo al activista a sentarse en la valla de cerramiento del parque de Maria Luisa, entre hierbas y basura, mientras le hacían quitarse los zapatos y calcetines a los que tuvo que dar la vuelta por orden de los agentes, además de ser cacheado e inspeccionado hasta por los genitales, mientras era interrogado semidesnudo por varios agentes a la vez, en plena calle. El activista que se dirigió a los agentes para decirle que creía que eso no eran formas de tratar a la gente y menos sin haber cometido ningún delito, hizo el comentario siguiente: Ni que fuera terrorista... a lo que uno de los agentes gritándole y en tono amenazante le dijo que no volviera a pronunciar esa palabra otra vez delante de él. Procediendo seguidamente a intervenirle la cámara fotográfica hasta que justificara su propiedad.
El Activista que afortunadamente conserva aun el ticket de compra original, se pregunta que hubiera pasado en caso de que hubiera tirado o extraviado el ticket, ¿hubiera perdido la cámara fotográfica? su herramienta de trabajo. Declara también que ha partir de ahora llevara siempre los ticket de compra de todas sus pertenencias, desde cámara fotográfica hasta calcetines.
Ecologistas en Acción lamenta y condena estas actuaciones, que no deberían ser propias de agentes de policía (insultos y humillación), considerándose actuaciones de otra época donde no existía la democracia, y espera que hechos así no se vuelvan a repetir. Se da la circunstancia de que en los últimos meses, se viene observando una actitud policial agresiva y represora hacia los colectivos ciudadanos por parte de la policía nacional en Sevilla. Hace pocas semanas, un periodista de “Indymedia Estrecho”, fue golpeado en la mano con objeto de que no tomara fotografías en el desalojo de la Fábrica de Sombreros. También recientemente, miembros de Greenpeace fueron detenidos por el despliegue de una pancarta contra el cambio climático en la Torre del oro, en una operación desproporcionada que involucró a docenas de policías nacionales y que provocaba unos atascos monumentales en el Paseo de Colón. Los activistas, ya identificados, fueron retenidos muchas horas sin justificación alguna. Hacemos directamente responsable al delegado del Gobierno en Sevilla y a los mandos policiales por la tolerancia hacia estas actitudes represivas contra asociaciones que no deben olvidar, defienden el medio ambiente y el pacifismo.
El gabinete jurídico de Ecologistas en Acción está estudiando la actuación de la policía para interponer una denuncia por vejación, insultos y abuso de poder. Además recuerda al ayuntamiento que debería de tomarse mas en serio el patrimonio verde e histórico de Sevilla y que la ley esta para que se cumpla no para saltársela a la torera.
>> Fotografías tomadas segundos antes de ser “detenido”:
http://picasaweb.google.es/arbolado.sevilla/AvdIsabelLaCatolica02?authkey=Gv1sRgCNOOg-v45tmMHA&feat=directlink
>> Documentos que certifican que esta historia absurda sucedió (clic para leer):