¿Para qué sirve la Policía Local?
Artículo de opinión de un diario de claro tufo derechista y reaccionario, aunque en este caso no podemos quitarle parte de la razón...
Esto pasa por querer doblar las leyes - como están haciendo con la ordenanza - y pretender acabar con los conflictos sociales y los problemas de exclusión social a base de medidas meramente policiales. Acabará habiendo más policías que personas. Y tendremos que inventarnos otra policía que controle a la policía. Y así, sucesivamente.
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Esto pasa por querer doblar las leyes - como están haciendo con la ordenanza - y pretender acabar con los conflictos sociales y los problemas de exclusión social a base de medidas meramente policiales. Acabará habiendo más policías que personas. Y tendremos que inventarnos otra policía que controle a la policía. Y así, sucesivamente.
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Diario de Sevilla
Domingo, 17 de febrero de 2008
El alcalde ha ordenado en los últimos dos años a la fuerza municipal que se centre en el vandalismo, la 'botellona', el tráfico y la vigilancia de los colegios, sin llegar a poner en marcha ningún plan concreto
Marzo de 2006. El alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, aprovecha la presentación del borrador de la ordenanza antivandalismo a las asociaciones de vecinos para anunciar una nueva unidad de la Policía Local que se encargará de aplicarla. Dice que se llamará Grupo Torre del Oro -imitando el nombre de Giralda que lleva la unidad especializada en la vigilancia del centro- e incluso cifra su dotación en medio centenar de agentes.
Mayo de 2007. Durante la campaña electoral el PSOE promete que colocará a un policía local en las puertas de cada colegio. Noviembre de 2007. El alcalde anuncia en su discurso del día de la Policía Local que la prioridad para los agentes de este cuerpo es el tráfico y por ello todos los esfuerzos deben centrarse en esta materia. Enero de 2008. Monteseirín dice en su intervención en un foro sobre seguridad celebrado en la Cartuja que la Policía Local de Sevilla tiene que combatir preferentemente los casos de vandalismo y ataques al mobiliario urbano.
Febrero de 2008. Nada de lo que el Ayuntamiento ha anunciado se ha llevado a la práctica. No se ha aprobado la ordenanza antivandalismo tras más de tres años elaborándose. No se ha colocado a un policía local en cada centro educativo de la ciudad. No se ha reforzado el servicio especial de este cuerpo contra la botellona desde la entrada en vigor de la ley andaluza que prohíbe beber en la calle, en noviembre de 2006. No se ha construido un botellódromo o recinto acotado donde se permita beber a los jóvenes pese a que la legislación tiene ya casi año y medio de antigüedad. Ni siquiera se ha puesto en marcha la red de comunicaciones Secora que en teoría mejoraría las comunicaciones entre los servicios municipales.
Y tampoco se ha ampliado el número de agentes encargados de la regulación del tráfico -como puede percibirse en cualquier hora punta- ni se ha conseguido explotar el famoso coche ponemultas para combatir de una vez por todas la doble fila. Lo único que el gobierno local ha hecho para combatir el tráfico ha sido un catálogo para aplicar el carné por puntos en el que se incluyen errores tales como restarle puntos a los dueños de las bicicletas que estuvieran mal aparcadas o entorpecieran el tráfico rodado.
Nada desde hace años. El organigrama de la Policía Local es prácticamente el mismo al del año 2002, ese mismo en que se produjo el robo a la joyería Román, por el que un juez ha condenado al Ayuntamiento a pagar medio millón de euros por la negligencia de dos agentes municipales. Sólo ha habido cambios operativos como la sustitución del antiguo teléfono 092 por el 112, que tanta polémica ha generado en el seno del cuerpo porque los policías dejaron de tener acceso a los avisos relacionados con las cuestiones de seguridad ciudadana. También se han sustituido los uniformes por unos nuevos más modernos y de los que se eliminó la corbata para evitar que los delincuentes pudieran agarrarse a ella. Claro que si las cuestiones de seguridad ciudadana no son competencia de la Policía Local no se entiende la explicación. Eso, más los cambios en la jefatura, por la que desde entonces han pasado tres personas: Juan José García, Rafael Alarcón y el recién llegado José Aulet.
El sindicato mayoritario en la plantilla sevillana, el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme), denuncia que la Policía Local de Sevilla se mueve a impulsos y que no hay órdenes concretas. "El alcalde anuncia un día una cosa y se supone que tenemos que centrarnos en ella, pero no pone los medios adecuados. Que si el vandalismo, que si la botellona, que si el tráfico... Y nosotros lo que pedimos es que nos ponga un psicólogo, porque realmente no tenemos instrucciones sobre qué hacer cuando salimos a la calle".
Así de gráfico se mostraba el presidente del Sppme en Sevilla, Manuel Bustelo, en unas recientes declaraciones a este periódico. Lo cierto es que Aulet se va a encontrar con una plantilla en la que en los últimos años ha ido cundiendo el malestar y, en ocasiones, la desmotivación. Dicen algunos miembros de este servicio que el alcalde no sabe qué modelo de policía quiere, que rema a contracorriente. En unos tiempos en los que la coordinación entre policías es clave no se entiende mucho que los agentes municipales no tengan conocimiento de cualquier problema de seguridad que se plantee en la calle.
La excusa oficial es que no son competentes en esta materia y que están para cumplir las ordenanzas municipales. La que tiene que ser su prioridad lleva tres años esperando su entrada en vigor y volvió a caerse del orden del día del Pleno de enero. También está la nueva norma de peatones y ciclistas. En la jefatura de la Cartuja todavía están almacenadas las bicicletas que el Ayuntamiento compró hace meses para formar una unidad ciclista de la que a día de hoy no se sabe nada. Para una vez que un anuncio del gobierno municipal se traducía en algo concreto...
Mayo de 2007. Durante la campaña electoral el PSOE promete que colocará a un policía local en las puertas de cada colegio. Noviembre de 2007. El alcalde anuncia en su discurso del día de la Policía Local que la prioridad para los agentes de este cuerpo es el tráfico y por ello todos los esfuerzos deben centrarse en esta materia. Enero de 2008. Monteseirín dice en su intervención en un foro sobre seguridad celebrado en la Cartuja que la Policía Local de Sevilla tiene que combatir preferentemente los casos de vandalismo y ataques al mobiliario urbano.
Febrero de 2008. Nada de lo que el Ayuntamiento ha anunciado se ha llevado a la práctica. No se ha aprobado la ordenanza antivandalismo tras más de tres años elaborándose. No se ha colocado a un policía local en cada centro educativo de la ciudad. No se ha reforzado el servicio especial de este cuerpo contra la botellona desde la entrada en vigor de la ley andaluza que prohíbe beber en la calle, en noviembre de 2006. No se ha construido un botellódromo o recinto acotado donde se permita beber a los jóvenes pese a que la legislación tiene ya casi año y medio de antigüedad. Ni siquiera se ha puesto en marcha la red de comunicaciones Secora que en teoría mejoraría las comunicaciones entre los servicios municipales.
Y tampoco se ha ampliado el número de agentes encargados de la regulación del tráfico -como puede percibirse en cualquier hora punta- ni se ha conseguido explotar el famoso coche ponemultas para combatir de una vez por todas la doble fila. Lo único que el gobierno local ha hecho para combatir el tráfico ha sido un catálogo para aplicar el carné por puntos en el que se incluyen errores tales como restarle puntos a los dueños de las bicicletas que estuvieran mal aparcadas o entorpecieran el tráfico rodado.
Nada desde hace años. El organigrama de la Policía Local es prácticamente el mismo al del año 2002, ese mismo en que se produjo el robo a la joyería Román, por el que un juez ha condenado al Ayuntamiento a pagar medio millón de euros por la negligencia de dos agentes municipales. Sólo ha habido cambios operativos como la sustitución del antiguo teléfono 092 por el 112, que tanta polémica ha generado en el seno del cuerpo porque los policías dejaron de tener acceso a los avisos relacionados con las cuestiones de seguridad ciudadana. También se han sustituido los uniformes por unos nuevos más modernos y de los que se eliminó la corbata para evitar que los delincuentes pudieran agarrarse a ella. Claro que si las cuestiones de seguridad ciudadana no son competencia de la Policía Local no se entiende la explicación. Eso, más los cambios en la jefatura, por la que desde entonces han pasado tres personas: Juan José García, Rafael Alarcón y el recién llegado José Aulet.
El sindicato mayoritario en la plantilla sevillana, el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme), denuncia que la Policía Local de Sevilla se mueve a impulsos y que no hay órdenes concretas. "El alcalde anuncia un día una cosa y se supone que tenemos que centrarnos en ella, pero no pone los medios adecuados. Que si el vandalismo, que si la botellona, que si el tráfico... Y nosotros lo que pedimos es que nos ponga un psicólogo, porque realmente no tenemos instrucciones sobre qué hacer cuando salimos a la calle".
Así de gráfico se mostraba el presidente del Sppme en Sevilla, Manuel Bustelo, en unas recientes declaraciones a este periódico. Lo cierto es que Aulet se va a encontrar con una plantilla en la que en los últimos años ha ido cundiendo el malestar y, en ocasiones, la desmotivación. Dicen algunos miembros de este servicio que el alcalde no sabe qué modelo de policía quiere, que rema a contracorriente. En unos tiempos en los que la coordinación entre policías es clave no se entiende mucho que los agentes municipales no tengan conocimiento de cualquier problema de seguridad que se plantee en la calle.
La excusa oficial es que no son competentes en esta materia y que están para cumplir las ordenanzas municipales. La que tiene que ser su prioridad lleva tres años esperando su entrada en vigor y volvió a caerse del orden del día del Pleno de enero. También está la nueva norma de peatones y ciclistas. En la jefatura de la Cartuja todavía están almacenadas las bicicletas que el Ayuntamiento compró hace meses para formar una unidad ciclista de la que a día de hoy no se sabe nada. Para una vez que un anuncio del gobierno municipal se traducía en algo concreto...
3 comentarios:
sirven para llevar la gorra
no para cobrar de los impuestos de gente trabajadora que quiere que sus derechos y libertades no se las priven gentuza como ustedes, maleantes y vagos
¿Que la policía (en general) sirve para algo...?
jajajajajajajajajajajajajajaja
A ver:
De los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado...
jajaja... (perdón) jjj...
Desgraciadamente solo conozco a los policías, en dos estados (situaciones) o poniendo multas y cortando el tráfico para registrar maleteros, o... simplemente no estando ahí, cuando los he necesitado.
¿Será que no entiendo su función...?
jajajajaja
(Perdón otra vez, es que me lo quiero tomar de buen humor)
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